LA CIUDAD, UN PROYECTO ETICO Y ESTETICO


Patricio Gross
Arquitecto
Director Instituto de
Estudios Urbanos
Pontificia Universidad
Católica de Chile
 
 

Abordar la ciudad es una tarea de envergadura; en ella se plasman y desarrollan todas las dimensiones del ser humano en su más formidable diversidad y complejidad. "La ciudad lo reúne todo, y nada que se refiera al hombre le es ajeno" dirá de ella Walt Whitman. 

Al ver como se deja a un lado la importancia e influencia de la ciudad en el ser humano y en la vida social, se pretende dar la espalda a aquello que nos constituye como comunidad, y nos identifica tanto cultural, estética y socialmente, siendo primariamente lugar de convivencia, de intercambio y transmisión de experiencias y conocimientos.   Uno de los casos es Santiago de chile, donde parte importante de su ser es una realidad desmembrada, carente de valor debido a las múltiples acciones que afectan  su integridad y conservación, pero no es solo esta ciudad la que se encuentra afectada, es la ciudad en general la que ahora carece de perfección, motivo por el cual no permite una retroalimentación activa con la persona.

La ciudad se constituye como el hábitat insustituible de la humanidad y como respuesta a la tendencia y necesidad del ser humano de comunicarse, por lo que se hace necesario recrearla desde un marco ético-estetico que permita además de embellecerla físicamente, crear modelos de convivencia sanos que promuevan el libre desarrollo de las personas, generando un ambiente agradable y equitativo con buenos métodos de gobierno y gran producción de oportunidades.